El crimen del contrabando atentan contra militares en frontera con Argentina
El crimen organizado del contrabando atacó este jueves a las patrullas combinadas que intervinieron la tranca de control en la población de Villamontes, Tarija, frontera con la República de Argentina, en el marco de la lucha contra la internación de mercadería ilegal en los vehículos de transporte público, sobre todo, flotas de las empresas interdepartamentales.
“Cada vez están siendo más agresivos, pero estamos tomando en cuenta nuevas acciones que vamos a desarrollar, porque no se puede justificar que personas contrabandistas estén cometiendo este tipo de acciones delictivas al contrabando”, dijo el viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Gral. Daniel Vargas Carrasco.
La autoridad comando la noche del jueves la intervención combinada, entre los efectivos del Comando Estratégico Operacional de Lucha Contra el Contrabando (CEO-LCC), SENASAG, INIAF, la Aduana Nacional, en la tranca de la localidad fronteriza de Villamontes.
Confirmó que en el operativo los contrabandistas agredieron a los militares del CEO-LCC, causando daños a la integridad física de los funcionarios, dañando también a la propiedad pública del Estado.
Sobre el ingreso de vehículos particulares como el transporte público que son utilizados para el ingreso de contrabando, la autoridad indicó que sigue siendo recurrente la utilización de estos autobuses de pasajeros para el contrabando.
“Nuevamente el día de ayer (jueves) hemos sido testigos de una empresa de transporte que solo tenían cuatro pasajeros y el resto del vehículo totalmente abarrotados de mercancía de contrabando con diferentes productos”, informó.
Al respecto afirmó que se realizó la denuncia oportuna sobre esta actividad ilícita, toda vez de que el contrabando hormiga se convirtió en contrabando masivo, pero que en próximos días surgirán algunas determinaciones de la Autoridad de Regulación y Fiscalización de Telecomunicaciones y Transportes (ATT), autoridad competente para regular el transporte público de pasajeros.
“El contrabando es toda una organización criminal delictiva. Lo más lamentable es que comunidades se están prestando a esta situación (…) protegen esta actividad ilícita; son aquellos que agreden a los funcionarios de la Aduana Nacional, SENASAG y a efectivos militares, en una constante provocación”, añadió.