Iver Villarroel: Un cantante orureño que triunfa a nivel internacional
Iver Villarroel y Edwin Castellanos son el dúo Tupay
El dúo Tupay, desde sus inicios en 1996 se perfiló como una de las agrupaciones más importantes de la música boliviana, reflejando sus éxitos a nivel internacional, por ello, es un orgullo que una de las mejores voces orureñas puedan ser parte de este ícono musical, se trata de Iver Villarroel, quien en esta nueva etapa de Tupay, logró la confianza del director del grupo, Edwin Castellanos.
Recientemente Tupay presentó su más nuevo corte musical, que llega en ritmo de bolero ranchero, “Abismo” y a partir de ello, Iver espera que vayan sumando los éxitos en el grupo que ahora lo alberga, porque su trayectoria en la música inició varios años atrás, siendo parte de grupos reconocidos, entre ello, Pasión Andina.
Iver Villarroel comprometido con su música
“Hemos empezado en la facultad, guitarreando, en esos momentos de ocio, en esos momentos increíbles que se nos quedan en la memoria, posteriormente hemos escalado y ustedes son los testigos de esa escalada que hemos tenido, sin embargo es para importante indicar que gracias a ustedes, gracias al apoyo de amigos, familia, amigos que tengo en Oruro, hemos decidido dar el paso más gigante que hemos tenido ahora, que es estar en Tupay, un dúo reconocido, ustedes lo saben , son más de 26 años que tiene Tupay y bueno, ahora estamos en la nueva era como primera voz, y esperemos que lo estemos haciendo de manera correcta, con mucha humildad y más que todo que sea del agrado de todos ustedes”, recordó.
Pero, uno de los hechos más significativos en su carrera, y que lo emociona de sobremanera, es el compartir una canción con uno de los cantantes más conocidos a nivel mundial como es el español Dyango, quien comparte crédito con Tupay en la canción “Abismo”, algo que Iver no esperaba.
Sus sueños siempre presentes en la vida de Iver
“Definitivamente no, sabemos que la música es muy amplia, pero cantar con semejante maestro yo nunca en mi vida (lo soñé), siempre lo hemos escuchado en casa, con nuestros papás, en alguna actuación en vivo, por la tele, pero nunca nos imaginamos interpretar, congeniar, hablar por Zoom, intercambiar criterios, por ejemplo de nuestra tierra orureña, de cómo es Oruro, y gracias a Dios, Dyango nos ha felicitado, semejante maestro que nos está impulsando en(esta) difícil profesión como es la música”, refirió.
Hace 20 años, Iver era parte de Pasión Andina, pero en determinado momento analizó junto a su familia dejar la música, pero el arte siempre llama a los talentosos, por ello, siempre estuvo vinculado a la música, por lo que espera dentro de diez años continuar ese camino.
Durante su paso por Pasión Andina
“Hace diez años también estaba disfrutando de la música que es nuestra pasión, en algún momento hemos decidido colgar los cachos, como se dice vulgarmente, pero la música nos ha buscado. Creo que dentro de diez, si así Dios me lo permite, me gustaría mucho o me veo siempre aportando con la música nacional, aportando con mi tierra y la cultura, que es lo que más necesitamos, la música hoy por hoy es el lenguaje del alma, es nuestra medicina, muchas personas utilizan la música terapéuticamente, entonces me voy aportando con lo mismo, y esperemos que esta pesadilla de la pandemia pueda pasar pronto”, destacó.
Desde muy joven, Iver demostró que tiene talento de sobra, pero siempre le faltó algo de suerte con su trayectoria, en algún momento pensó en sacar un trabajo en solitario pero las condiciones no se dieron, pero es un sueño que aún no descarta, por el momento, brindará todo lo que tiene a que Tupay siga creciendo.
“Lo que Dios nos diga, lo que Dios nos depare, no voy a mentir que en algún momento siempre hemos pensado en hacer un proyecto de solista, pero se requiere de mucho esfuerzo, hay mucho que hacer, lamentablemente no hay mucho apoyo por ningún lado, hay que batallársela sola, es el defecto que hay en Bolivia, ojala esto cambie y den la prioridad a músicos, a mucha juventud, a mucho talento que hoy por hoy está creciendo, pero no los estamos exportando, no los estamos explotando. Ojala si Dios quiere, podamos hacer algún disco, que será un gustito aparte”, remarcó.
Iver Villarroel, demuestra que cuando se da una oportunidad al talento, se puede lograr grandes cosas, por lo que seguirá trabajando en su crecimiento profesional, pero también está dispuesto a apoyar a las nuevas promesas de la música, si es que tiene oportunidad, por el momento seguirá trabajando en Tupay por el engrandecimiento de la música boliviana.