San José tiene seis candados que le impiden habilitar

David Rivero actual titular de San José

Habló el exasesor legal Victor Hugo Pérez con medios de La Paz donde reveló que la vigencia de cinco procesos FIFA por los casos de Alessandrini, Dominguez, Leroyer, Sanguinetti y Quiroga. A esta situación se suma el caso del uruguayo Tancredi.

No son uno, sino seis. San José enfrenta ante la FIFA seis procesos de veto de inhabilitación por deudas con exjugadores extranjeros, la mayoria argentinos que no lograron convencer en su momento y se les aplicó la rescisión de contrato unilateral, cuyas consecuencias complican economicamente al crédito orureño

La última notificación fue del exenganche argentino Javier Sanguinetti que pide el pago de 77.500 dólares. Parecía que era el único impedimento pero el exasesor legal del club en la gestión del expresidente Huascar Antezana, Victor Hugo Pérez, recordó ante medios de prensa de La Paz la existencia de más vetos para habilitar jugadores en la gestión 2021.

El especialista en justicia deportiva mencionó que el santo debe afrontar las demandas con el delantero Cristian Alessandrini, el arquero Juan Pablo Domínguez; Nahuel Quiroga, Manuel Layorey, y Javier Sanguinetti, los cuales sumán alrededor de 1.800.000 dólares. La sexta demanda es del uruguayo José Luis Tancredí que data desde el último trimestre de la gestión 2018 por incumplimiento en los acuerdos para el pago de sueldos retrasados.

Las rescisiones unilaterales vinieron desde Quiroga, lateral izquierdo argentino que no convenció al extécnico Eduardo Villegas que lo rechazó para ser habilitado para los torneos que San José afrontó en 2018.

Wilson Martínez ex presidente de San José ahora detenido en la cárcel San Pedro por otros casos de estafa

El jugador fue la primera incorporación del expresidente Wilson Martínez, antes que llegue Villegas. Quiroga confesó ante medios de Oruro que otro nexo para su llegada fue Sanguinetti con quien compartió vestuario en Argentina. El jugador dejó el club en el primer trimestre de 2018 y al contar con el contrato instaló demanda contra San José, ganando la misma para cobrar por el tiempo acordado.

A mediados de 2019, la dirigencia de Martínez definió la salida del arquero Dominguez y Alessandrini, por bajo rendimiento en el torneo Apertura de esa gestión, con el proposito de habilitar otros jugadores situación que no se logró por deudas con otros exjugadores del santo (Caso Tancredi y el enganche argentino Lizandro Alzugaray).

Alessandrini fue pedido por el extécnico chileno Miguel Ponce para volver pero la decisión fue tomada, y el ariete no pudo volver al santo. Al no existir solución a los acuerdos con la dirigencia, ambos jugadores, instalaron las demandas pidiendo cobrar todo el contrato con procesos que se anunciaban en esa gestión.

Durante esa época surgio la demanda de Leroyer, jugador argentino que vino en 2017 pero acordó su salida del club, con el compromiso de pago firmado por Martínez. El acuerdo nunca se ejecutó y el defensor activo las multas que debía el santo por cada día de retraso. En junio de 2019, la deuda alcanzó los más de 200.000 dólares por la falta de atención de San José.

Huascar Antezana fue presidente la gestión 2020 (Foto Deporte Total)

En los últimos casos, se encuentra el caso de Sanguinetti que definió su salida por la falta de pago de sueldos y premios que le debió la dirigencia de Wilson Martínez. El argentino se marchó de Oruro y anticipó la instalación de la demanda que llegó mediante FIFA a finales de diciembre de 2020.

Se incrementa

Esta cifra podría incrementarse por una segunda demanda de Quiroga que según su abogado, el uruguayo Felipe Vásquez, sostuvo que existe un segundo juicio porque el lateral argentino firmó un nuevo contrato para la gestión 2020-2021 en febrero del pasado año y la misma no se cumplió; y ahora el argentino pide más de 200.000 dólares.

Existe un sexto candado que es el caso del mediocampista uruguayo José Luis Tancredi, cuya deuda no se solucionó y la misma sigue latente en FIFA. Desde Uruguay se anticipa que existen otros casos a activarse en los siguientes meses, entre ellos del defensor argentino Marcos Barrera y el arquero Carlos Franco, campeones en la gestión 2018.

Contra la pared en la FBF

Para evitar más pérdida de puntos hasta la siguiente semana, San José debe presentar pruebas ante el Tribunal Superior de Apelaciones de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) que demuestren el cumplimiento del pago de las deudas económicas con los exdelanteros Rodrigo Ramallo y Carlos Saucedo, como también el extécnico Eduardo Villegas.

El santo iniciará el siguiente torneo con tres puntos menos y esta situación se puede agravar ante un directorio que tiene poco presupuesto personal para prestar al club cuyas deudas económicas se conocían desde la gestión 2019.

La situación es más crítica puesto que el presidente David Rivero sentenció que las deudas en San José “llegan fácilmente a los seis millones de dólares”, entre demandas en la jurisdicción deportiva nacional y en FIFA, última instancia que tiene cinco procesos que impiden al santo a registrar jugadores. 4.200.000

En medios de la ciudad de La Paz, Rivero no se guardó nada y se fue de frente contra los exdirigentes acusándolos de “delincuentes que nos han dejado en este estado”. La temeraria frase tuvo repercusión en exdirigentes que desafían a la actual dirigencia, ligada con el presidente del Tribunal de Honor Luis Cossio, a invertir en club o renunciar de toda actividad del santo.

Primer aplazamiento

El cuerpo legal de la actual dirigencia del presidente David Rivero (compuesto por cuatro abogados) no logró frenar la nueva quita de tres puntos que se efectivizó el martes 12 de enero al no demostrar los descargos ante la entidad de justicia de la federación.

El abogado de Villegas, Ricardo Alípaz, sostuvo que la dirigencia no desembolso el primer pago. La dirigencia no logró contactarse con el exariete Carlos Saucedo y no tuvo otra que pedir auxilio a la prensa, como también amigos cercanos para tratar, sin existo, contactarse con el jugador.

“Obviamente no tenemos todo el total, pero sí tenemos para realizar un acuerdo interno de acuerdo a las posibilidades de la actual dirigencia”, sostuvo Humérez

El vicepresidente del club Serapio Humérez Camacho en contacto con el programa “Elite-Deportes en Acción”, mencionó que se tiene acuerdos firmados con Ramallo y Villegas. El dirigente empezó a mencionar al “enemigo oculto” que busca el descenso de San José, a pesar que antes de las elecciones se conocían las demandas que arrastraba el club.

San José necesita inversión y la dirigencia menciona que buscará enfrentar la difícil situación crítica con los recursos que dispone frente a la falta de empresas interesadas en asumir el mando de San José.

“(En las elecciones) no ha habido inversores y gente que venga a participar. La actitud de nuestro trabajo es cooperar con todo lo que tenemos y donde generemos dinero con todas estas actividades, no hay otro sentido, nadie vendrá poner tanto dinero para poder recuperar (…) se necesita trabajar y ordenar nuestra institución para tener un ingreso propio”, según el razonamiento de Humérez.

Más allá de los dardos de la actual dirigencia contra los exdirigentes, la situación en San José muestra el primer aplazamiento de la directiva que se ampara en lograr apoyo del golpeado empresariado orureño que producto del Covid-19 y la falta de exportaciones, ha visto disminuido sus ingresos, sumado la baja cotización de los minerales, en las comercializadoras, en otrora potenciales sponsor del crédito orureño.

Tampoco los casos de diciembre

Humérez mencionó que las notificaciones que llegaron el 24 de diciembre, con los casos de JhonJairo Villegas, Luis Rodrigo Banegas, Gianakis Suárez, Nery Ovando Guerrero, y Ronald Segovia, los mismos que siguen en diálogo y no existe un documento firmado para aplazar las demandas: “Estamos en pleno proceso de arreglo”, dijo. El cambio de gestión ayudó al club pero la justicia deportiva de la FBF puede fallar de diferente forma.

La FBF notificó a San José con el pago de la deuda a esos jugadores y le quitó tres puntos del pasado campeonato. El documento llegó cuando se activó el amparo constitucional contra la gestión del expresidente Huascar Antezana y provocó la indefensión al club para realizar cualquier argumento jurídico para posponer la ejecución de la resolución.

Pueden volver

Frente a esta situación, los ex directivos como Wilson Martínez (expresidente 2017-2019) y el ex asesor legal Víctor Hugo Pérez, salieron al paso y le pidieron “no llorar” a Rivero que estuvo en el Tribunal de Honor que sacó de la presidencia a Antezana.

El día miércoles 13 de enero, un día antes de su detención por estafa a su exsecretario general de su directorio (Oscar Ayala), Martínez que infló las deudas al no lograr arreglar definitivamente con un pago económico, las salidas de los argentinos Quiroga, Leroyer y la ampliación del préstamo de Carlos Lampe con el club Huachipato de Chile para el segundo semestre de 2019, y por el cual, no jugó ante el veto de habilitaciones, se ofreció a regresar a tomar las riendas del club en contacto con FIDES-La Paz.

El ex titular santo recordó que sopeso con las mismas deudas cuando asumió en 2017 y recordó que Cossio fue quien lo sacó de la presidencia en septiembre de 2019 truncando la finalización de  su gestión para saldar las deudas que se venían a partir de enero de 2020.

Martínez reveló que la deuda en la FBF es de 2.800.000 dólares correspondiente a 2019 y 2020. El extitular santo fue aprendido el jueves 14 de enero por la denuncia particular de estafa por su exsecretario general Oscar Ayala.

El equipo orureño cuando participó en la Copa Libertadores

Por otro lado, Pérez sostuvo que existe una “falta de capacidad legal” en San José para buscar frenar las demandas. “El único juicio de nosotros es del Turco (Omar) Asad, que lo presentamos bien y ya saldrá la resolución”, sostuvo en contacto con FIDES – La Paz.

Pérez admitió que hizo “técnica legal” para frenar las deudas y darle tiempo San José para gestionar el monto económico para saldar las deudas institucionales que asumió el club orureño. “En enero de 2020 ya hubo orden de desafiliación de FIFA pero lo frenamos”, sostuvo.

La falta de experiencia legal en el ámbito deportivo puede ser el lado más débil del club que corre el peligro de desaparecer.