En su búsqueda afectan a Sebastián Marset con $us 25.000.000 en Bolivia
El Gobierno boliviano no solamente ofreció una recompensa de 100.000 dólares para dar con el paradero del “pez gordo” del narcotráfico, el uruguayo y prófugo internacional, Sebastián Enrique Marset Cabrera, sino que está en marcha el Plan “León 23” que permitió afectar en patrimonio al menos 25 millones de dólares.
“Hemos logrados afectar cerca de 25 millones de dólares en territorio boliviano, pero en la República del Uruguay hablan que este sujeto movía aproximadamente más de 800 millones de dólares americanos”, dijo este lunes el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo.
Detalló que se desarrollaron 85 allanamientos, se consiguió la detención preventiva de 26 personas, se busca a dos principales implicados, cuatro personas se favorecieron con las medidas sustitutivas, otros cuatro consiguieron sus mandamientos de libertad y en la actualidad hay 54 investigaciones en curso.
En este periodo de búsqueda y allanamientos, se secuestró al menos 28 bienes e inmuebles, se intervino cuatro aeródromos en Santa Ana y otros cuatro en el Trompillo de la ciudad de Santa Cruz.
También secuestraron 19 fusiles, 14 pistolas, 3 rifles, 21 escopetas, 15 revólveres, más de 4000 proyectiles de varios calibres, dos granadas de guerra, 34 cargadores de fusil y de pistola, 5 chalecos antibala, 4 aeronaves en Beni, 3 en Santa Cruz, 82 vehículos, entre motocicletas, camiones, vagonetas, cisternas y cuadra track.
Resaltó que la Policía Boliviana a través de sus unidades y los grupos de elite, entre esos, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico desbarató oportunamente a esta organización criminal de Marset que no tuvo la necesidad de usar el arsenal de armas adquiridas.
Además de capturar a los estrechos colaboradores y cómplices de la organización criminal que extendió sus tentáculos hacia los círculos poderosos de Santa Cruz, lo que se demuestra el interés de corromper las instituciones. "Demuestra nuestro compromiso y fortaleza como Gobierno nacional en la lucha contra el narcotráfico. Sabemos y lo reitero el objetivo no esta cumplido, pero hemos avanzado cualitativamente y cuantitativamente en la desarticulación de esta organización criminal", remarcó.
Aprovechó para hacer conocer que en este caso no se valoró el trabajo que desarrolla la Policía Boliviana sobre la Operación “León 23”. Anotó que no hubo el acompañamiento de la justicia, porque “cuando teníamos informes de inteligencia, se manifestó que se estaba acorralando a Sebastián Enrique Marset Cabrera, pero las órdenes de allanamiento que la solicitábamos tardaban 24, 48 y 72 horas”, apuntó.
Se preguntó cómo puede ser que cuando se tenía información de la probable presencia en algunos lugares de los familiares del narcotraficante y las órdenes de allanamiento tardaban dos, tres y días.
Aseveró que para la Policía no existe descanso y uno de los principales elementos que se encontró son dificultades por las demoras en la justicia, el relacionamiento social de alguna parte de la elite cruceña con el prófugo narcotraficante que busco mimetizarlo en el medio durante bastante tiempo desde que ingreso al país en la gestión 2018, 2019 y parte del 2020.
Después de su reclusión en Dubái entre el 202-2022, el 2023 nuevamente ingreso al país y tenía toda una fachada y había gente que sabía quién era, a qué se dedicaba con diversas identidades, puntualizó.