El plan de “Acción nacional para la minería del oro artesanal y a pequeña escala”, que busca disminuir paulatinamente el uso de mercurio y eliminarlo, propone actuar en 3 áreas clave, afirmó el viceministro de Política Minera, Regulación y Fiscalización, Marcelo Ballesteros.
Explicó que el objetivo central del plan de acción nacional del Estado Plurinacional es proteger la salud humana y el medio ambiente, además de reducir progresivamente las emisiones y liberaciones de mercurio, causadas por actividades humanas, especialmente en la minería artesanal y de pequeña escala (MAPE).
“En este sentido, se busca disminuir paulatinamente el uso de mercurio y eliminarlo en la medida de lo posible, mediante un monitoreo continuo de los impactos en la salud y el medio ambiente. Para alcanzar este objetivo, se propone actuar en tres áreas clave”, indicó.
Mencionó que esas tres áreas clave son:
– La eliminación de la molienda – amalgamación simultánea en la minería de veta, para evitar procesos que incrementan el uso del mercurio.
– Reducción del uso de mercurio en la minería de veta a través de la incorporación de tecnologías limpias y prácticas responsables.
– Reducción del uso y la pérdida de mercurio en la minería aluvial, implementando alternativas técnicas y mejoras en el proceso de extracción.
El plan de acción nacional de Bolivia se articula a través de ocho estrategias clave que abordan los principales desafíos de la MAPE, alineadas con el compromiso de formalización y sostenibilidad del sector minero. Las estrategias propuestas son las siguientes:
– Formalización de la MAPE: Promover que la MAPE cumpla con la normativa nacional vigente y fortalecer el control gubernamental. Esto se logrará mediante la creación de normativas complementarias para la formalización diferenciada entre minería aluvial y de veta, el desarrollo de programas de asistencia técnica.
– Reducción de la minería ilegal: Prevenir y reducir la minería ilegal a través de acciones efectivas y el establecimiento de un Comité Interinstitucional para el monitoreo y control de actividades ilegales. Esto contribuirá a evitar la expansión de la minería ilegal y la reinstalación en áreas previamente controladas.
– Disminución del uso de mercurio: Fomentar la adopción de tecnologías limpias y sostenibles, como el uso de amalgamadores sin molienda y retortas, para reducir y eliminar el mercurio en el procesamiento de oro. La capacitación continua de los actores mineros y el intercambio de experiencias internacionales serán claves en este proceso.
– Control de importaciones y uso de mercurio: Fortalecer el Decreto Supremo 4959 respecto al control importación de mercurio mediante otras regulaciones necesarias. Se propondrá incrementar aranceles y fortalecer la fiscalización del contrabando de mercurio, lo que permitirá reducir su entrada al país y su uso en procesos ilegales.
– Plan de Mercurio y Salud: Reducir los riesgos y efectos derivados de la exposición al mercurio a través de diagnósticos de salud en zonas mineras y el fortalecimiento de los sistemas de monitoreo y atención médica para la población afectada.
– Mejoramiento de las condiciones de género en la MAPE: Promover la capacitación de mujeres en los procesos de formalización, así como en prácticas ambientales responsables y técnicas de recuperación de mineral sin mercurio, mejorando así sus condiciones laborales y su participación en el sector minero.
– Socialización continua del PAN: Crear y fortalecer los canales de comunicación con los actores mineros y comunidades locales, asegurando la participación activa en la implementación del PAN. Esto incluye la difusión de las estrategias, objetivos y actividades del plan para mantener a todos los involucrados informados y comprometidos.
– Acceso a financiamiento para la MAPE: Facilitar el acceso de las cooperativas mineras y pequeñas empresas del sector minero a financiamiento formal y mercados a través de programas de capacitación técnico-financiera. Esto permitirá mejorar la gestión administrativa de los actores productivos mineros y acceder a un cambio de tecnología.
“Estas estrategias buscan formalizar la MAPE, reducir la minería ilegal y promover el uso de tecnologías limpias, garantizando la protección ambiental, el mejoramiento de las condiciones de trabajo en el sector minero, y la inclusión de género en las actividades productivas. El éxito de este plan dependerá de la cooperación interinstitucional, el compromiso de los actores mineros, y el apoyo de las comunidades para asegurar una minería más sostenible y responsable”, puntualizó el viceministro.
Resaltó que el gobierno del presidente Luis Arce demuestra su voluntad y compromiso con el cumplimiento de las obligaciones internacionales en materia ambiental y de salud pública, al mismo tiempo que busca transformar la minería aurífera en una actividad más segura, sostenible y responsable.
“Este compromiso tiene como objetivo beneficiar a los mineros, las comunidades, los pueblos indígenas y otras instituciones vinculadas al sector, generando un impacto positivo y duradero”, remarcó.