La jornada de violencia que desataron los evistas y dejaron al menos 32 heridos entre efectivos policiales y población contrario a los bloqueos, en la población de Llallagua, el ministro de Gobierno, Roberto Ríos Sanjinéz, rechazo la estrategia de confrontación que incita, Evo Morales para dejar impune las acusaciones que pesan en su contra y de insistir con su postulación.
“𝗟𝗼 𝘀𝘂𝗰𝗲𝗱𝗶𝗱𝗼 𝗵𝗼𝘆 (martes) 𝗲𝗻 𝗟𝗹𝗮𝗹𝗹𝗮𝗴𝘂𝗮 𝗿𝗲𝗳𝗹𝗲𝗷𝗮 𝗲𝗹 𝘃𝗲𝗿𝗱𝗮𝗱𝗲𝗿𝗼 𝗼𝗯𝗷𝗲𝘁𝗶𝘃𝗼 𝗱𝗲 𝗘𝘃𝗼 𝗠𝗼𝗿𝗮𝗹𝗲𝘀: forzar su candidatura al margen de la Constitución y por encima del pueblo boliviano”, dijo el ministro en conferencia de prensa.
Esta jornada, añadió, 𝗺𝗮́𝘀 𝗱𝗲 𝗺𝗶𝗹 𝗽𝗲𝗿𝘀𝗼𝗻𝗮𝘀 𝗮𝗰𝘂𝗱𝗶𝗲𝗿𝗼𝗻 𝗮𝗹 𝗽𝘂𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗯𝗹𝗼𝗾𝘂𝗲𝗼 𝗰𝗼𝗻 𝗯𝗮𝗻𝗱𝗲𝗿𝗮𝘀 𝗯𝗹𝗮𝗻𝗰𝗮𝘀, en un intento pacífico por pedir diálogo. Sin embargo, la 𝗿𝗲𝘀𝗽𝘂𝗲𝘀𝘁𝗮 𝗳𝘂𝗲 𝘃𝗶𝗼𝗹𝗲𝗻𝗰𝗶𝗮: 𝗽𝗶𝗲𝗱𝗿𝗮𝘀, 𝗱𝗶𝗻𝗮𝗺𝗶𝘁𝗮𝘀 𝘆 𝗮𝗴𝗿𝗲𝘀𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀, denunció.
Lamentablemente, se reportaron más de 30 heridos entre civiles y policías, además de destrozos en el Comando Regional, las oficinas de Tránsito y viviendas cercanas a la plaza principal, apuntó.
“Queda claro para todas y todos los bolivianos que esto no es una demanda social, sino una estrategia de confrontación que busca quebrar el orden democrático. Morales insiste en una candidatura inconstitucional y pretende, además, eludir los procesos judiciales en su contra. Por eso promueve la convulsión y los bloqueos, que ya han causado pérdidas por más de 700 millones de dólares”, subrayó.
Para Ríos, el daño va más allá de lo económico: hay un intento deliberado de dividir al país con tal de cumplir sus objetivos personales.
“Desde el Gobierno Nacional rechazamos con firmeza estos actos. Evo Morales no está por encima de la ley. La población exige paz, elecciones transparentes este 17 de agosto y respeto a la Constitución”, afirmó acompañado del comandante general de la Policía, Gral. My. Augusto Russo, el viceministro de Régimen Interior y Policía, Johnny Aguilera.
Dea
