Una situación crítica se vive en el trópico cochabambino, donde además de que más de 1.380 familias han resultado afectadas y 210 fueron damnificadas debido a las inundaciones causadas por el desborde de ríos, se anuncia un nuevo frente frío que puede traer consecuencias devastadoras, advirtió este lunes el Coordinador de Defensa Civil en Cochabamba, Samuel Pereira.
Explicó que los cultivos también sufrieron graves daños, con más de 2.500 hectáreas bajo el agua y la ciudad de Puerto Villarroel se encuentra anegada, lo que generó pérdidas significativas en la producción de arroz, yuca y otros productos agrícolas que abastecen a la ciudad.
“El hermano presidente Luis Arce ha dispuesto medidas para atender la emergencia, incluyendo el envío de ayuda a La Paz para su pronta atención. Sin embargo, la aprobación de créditos para apoyar a las familias afectadas se encuentra estancada en la Asamblea Legislativa Plurinacional debido a la oposición de algunos diputados y senadores del trópico cochabambino”, expresó Pereira.
En ese sentido volvió a solicitar a los asambleístas nacionales que aprueben los créditos destinados a apoyar a las familias afectadas, ya que esta ayuda beneficiará directamente a los hermanos del campo y no al gobierno o al Presidente.
“Se hace un llamado a la reflexión a los diputados y senadores para que depongan intereses personales y políticos ante la tragedia que están sufriendo sus propios hermanos en el trópico cochabambino”, manifestó.
Además de las inundaciones actuales, el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) ha anunciado un nuevo frente frío que azotará el trópico y el municipio de Ayopaya en Cochabamba, lo que podría agravar aún más la situación.¹
La situación en el trópico cochabambino es devastadora, con comunidades y sindicatos bajo el agua y familias enteras afectadas. La falta de aprobación de créditos y la oposición de algunos asambleístas locales han generado frustración y dolor en la población afectada.
Rdc/dea